Devocionales

Confesión

¿Que haces cuando vez tu realidad postrarse ante ti, y lo que vez no es lo que esperabas? ¿Cuando los momentos felices son fugases y sientes que solo das de una parte ti, pero nadie esta dispuesto a recibir todo lo que eres, lo bueno y lo no tan bueno?  Cuando las sonrisas son mentiras fabricadas. Cuando las verdades son un espacio donde se construyen peleas y dejas de decir lo que sientes, por el simple hecho de no caer en un pozo, donde no sabea que tan profundo sea.  ¿Que haces cuando sientes que tu compromiso es mas con Dios y no con lo que esta a tu alrededor, y eso te causa dolor y algunas veces angustia porque muchos no entienden quien eres? ¿Qué pasa cuando muchas veces te encuentras miranda hacia atrás mientras los años pasan y la infelicidad te sigue acompañando aun cuando ya tu no la quieres a tu lado?  ¿Sera que  mi capacidad de amar se ha limitado a mis hijos?  ¿Que ya no siento y no me importa lo que sucede a mi alrededor? ¿Sera que mis emociones siguen controlando lo que hago y lo digo? ¿Sera que lo siento es mas de lo otros pueden recibir y quizás no saben o no pueden dar lo mismo? ¿Por qué siento tanto y me duelen tanto las cosas? ¿Será que camino en vía contraria al mundo y aun no me he dado cuenta?

¿Quizás me he aferrado a mi trabajo y mi trabajo se esta llevando todo cuanto soy? Que lo que tengo es simplemente por casualidad de la vida.  O Dios de alguna forma extraña se empeñado en trabajar conmigo y no se cuanto tiempo dura este entrenamiento.  Si lo que estoy supuesto a padecer en su nombre es parte de lo que estoy viviendo.  Y que su divina providencia se encarga de poner en mi camino las oportunidades  de poder vivir algunos momentos de felicidad para que no desmalle en le camino. Quizás no me queda otra razón por sentir lo que siento, este dolor por la gente.  El saber que dentro mi puso algo. Que me hace observar y sentir lo que otros sienten y muchas veces ver lo que ellos ven. Y hasta saber lo que están pensando.  Esto me duele más aun.  El no saber cual es el próximo paso muchas veces es desconcertante. Pero creo en su promesa.

He llegado a este punto de mi vida y mis confusiones se acumulan. Como lo hace la nieve en medio de la tormenta.  Mis espacios cada vez se hacen más pequeños.  Y los márgenes para cometer errores ya no son tan amplios.  Cada decisión cuenta y cada palabra la tienes que medir para no ofender. Pero al final del día, lo que buscas es no ofender a Dios, sobre todas las cosas.   Pero muchas veces esto es más de lo que puedo asimilar.  Muchas me he preguntado que hago aquí y otras me pregunto cual es mi lugar. Y en otras ocasiones no se porque tome esta o aquella decisión. Solo sé que me toca vivir con ella, ya sea buena o mala.  Y como dicen que la peor decisión es la que no se toma,   Al final del día existe un solo responsable de lo que soy y puedo ser….Primero Dios y luego yo. Dios por su creación y yo porque me dio la libertad de actuar en base su palabra. 

Pero nada puedo hacer si no es con su dirección.  A ti padre mírame y muéstrame el camino. Tómame de la mano y llévame donde tengo que ir.  Muéstrame la luz y dame de tu paz.  Nunca dejes de brindarme tu guía.  Padre. En el nombre de Jesús amen. 

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